La Unión Sindical
Obrera (USO) ha pedido al Gobierno que obligue a bancos y cajas a reducir las
hipotecas de los empleados públicos que tengan suscritos préstamos con una
cuota doble en los meses de julio y diciembre, después del anuncio que hizo
ayer sobre la supresión de la segunda paga extra.
Para el sindicato, los nuevos recortes "no son más que la confirmación
de los peores augurios, pues el Ejecutivo ya los venía anunciando en los
últimos días través de globos-sonda".
La organización ha destacado que la eliminación de la paga de Navidad supone
una rebaja salarial del 7%, "lo que significa que en los últimos años los
empleados públicos han perdido un 28,46% de su poder adquisitivo, fruto de las
sucesivas congelaciones salariales, que ya alcanzan un 20%".
El secretario general de la
Federación de Empleados Públicos de USO, Luis Deleito, ha
rechazado "radicalmente" la medida, "pues el sindicato siempre
se ha opuesto a este abono diferido de salarios mediante planes de pensiones,
que solo sirve para engordar las arcas de UGT y CC.OO., partícipes de algunas entidades
financieras, como BBVA".
Deleito se ha dirigido hoy por carta a los dirigentes del resto de sindicatos con representación en la
función pública para celebrar una reunión conjunta en la que se plantee una
respuesta "adecuada" a esta medida.